viernes, 24 de junio de 2011

Trance addict

Las semanas han pasado después del viaje a Islandia y aquí en Brno han sido pocas las novedades que contar: trabajo, algo de fiesta y Carmen.
El primer gran evento llegó el 10 de Junio, cuando volvimos a Bratislava por motivos de ocio una vez más. El gran Armin Van Buuren daría todo un fiestón en el estadio de hockey de la capital eslovaca. El espectáculo distó bastante de la típica macrofiesta pastillera, ayudándose de la orquesta clásica de Bratislava, cantantes vocales usuales en sus shows y su hermano Eller, que estuvo increíble en sus intervenciones con la guitarra.









También fue la última oportunidad de decir adiós y desear un buen viaje de vuelta a Marta, Ana, Paolo y compañia, que estaban dando sus últimos coletazos del Erasmus.
Justo una semana pasaría para ver al único dj que hace competencia a Armin en listas de éxitos y fiestas internacionales, el archiconocido Tiësto. Esta vez no tuve ni que moverme, el artista holandés aparecería en Brno en el mismo pabellón que ví hace un año a Paul Van Dyk. Ni Carmen ni yo teniamos entrada anticipada, pero fue casi mejor, ya que las compramos en la reventa a menos de la mitad. Con esta fue la quinta vez que he pagado por ver a este hombre, y la verdad es que me decepcionó un poco, pinchando mucho electro comercial y olvidándose de sus raices tranceras. Aún así, la fiesta no estuvo del todo mal.





Por otro lado, lo del tiempo aquí en Brno es ya de psiquiátrico. Hay dias que hace 32º, unos calores no muy normales por tierras eslavas y al dia siguiente empieza a llover y baja la temperatura a 6º o 8º. Desde hace ya más de un mes, los fines de semana son raramente respetados, y llueve casi todos, impidiendo asi cualquier pequeña escapada al campo o pueblo cercano. Pero bueno, tampoco es motivo de alarma, porque en menos de una semana volveré a pisar suelo español.

Next chapter: Madrid & Torrevieja


De los mejores momentos de la noche de Armin: Coming Home by Eller van Buuren

jueves, 16 de junio de 2011

Iceland IV : Grimsvotn, Geysir, Gullfoss, Reykjavik

Tras la noche en aquella casa perdida de increibles vistas, empezamos a recorrer la parte sur del pais, completando así la carretera circular número 1.
El glaciar se hacía más visible ya pasado Höfn imponiendo su superficie helada a montañas, praderas y rios. Después de unas decenas de km, dimos con la majestuosidad del Jökulsárlón Glacier Lagoon, que es la desembocadura del glaciar en forma de pequeños icebergs que acaban en el Ártico. La carretera goza de un puente que atraviesa esta maravilla y donde por supuesto paramos para hacer las fotos oportunas. La vista era muy bonita, pero podría haber sido inmejorable si el volcán no hubiera eruptado semanas antes. El Grímsvötn es un volcán que se encuentra en el propio Glaciar y que provoca permanentemente la fundición de parte del hielo que tuvimos oportunidad de ver, más continuos terremotos y nube de cenizas volcánicas, que provocaron que toda la zona estuviera cubierta por un manto negro. Tan sólo los icebergs que se volteaban, estaban limpios y azules tras el baño de agua glaciar. Aún así el paisaje era espectacular.









Los siguientes 60 o 80 km estaban cubiertos por la ceniza, que semanas antes había provocado incluso el cierre temporal de la carretera, la evacuación de pequeñas granjas y la cegera permanente que ha afectado a centenares de ovejas de la zona. Con esto se explicaba también que estuvieran a veces en medio de la carretera sin saber donde ir. Me llevé también dos botecitos llenos con ceniza volcánica que luego vi en tiendas venderlo por 15 euros...jajaja


Y con ustedes, una foto histórica, que representa la armonia con la naturaleza y nuestro logro de estar frente al Glaciar-Volcán como Dios nos trajo al mundo:



Los siguientes 100 km estarían repletos de cascadas de agua, montañas increibles y paisajes verdes. De lo más bonito para mi gusto, la cascada de Skógafoss, una vista digna de películas como Jurassic Park:







El dia lo acabamos en una pizzeria en un pueblo llamado Hvolsvöllur, dónde Matt volvería a pasar la noche en una guesthouse, mientras Dario y yo, haríamos noche en el coche. Y la mañana siguiente haríamos el denominado Golden Circle, que es nada más y nada menos que la ruta más turística de Islandia, dado su cercania a Reykjavik. Consiste en desviarse desde Sellfoss por la carretera 35 para ver el famoso Geysir y la cascada de Gullfoss. Pero antes de llegar, dimos con un cráter curioso y unos paisajes volcánicos que parecian haber salido del planeta Marte:




Y más tarde llegamos. Ese famoso fenómeno natural llamado Geysir, que consiste en una erupción de agua hirviendo de una fisura en la tierra. Obviamente queriamos verlo en acción, y por eso fuimos al de atracción más turistica, el Geysir de Strokkur, que lanza agua cada 4-6 minutos con alturas de 20-25 metros. Todo un lujo que solo se puede ver en muy pocas y especificas partes del mundo.







Nuestro viaje estaba a punto de finalizar, viendo como última atracción turística la cascada de Gullfoss, bastante impresionante también.









Tras ello, vuelta a Reykjavik y vuelta a un techo donde dormir, el mismo Hostal de la semana anterior. Ya estábamos en Junio, lo que significa el inicio de la temporada turística y los precios eran más altos, lo que nos supuso pasar a dormir a dormitorio compartido en el sótano del edificio. Compañero de batallas en el cuarto, como no, nuestro nuevo amigo Matt, el australiano.

El fin de semana en la capital fue como era de esperar, fiesta, últimos paseos por la ciudad y compra de algún que otro souvenir. Teniamos también la misión de al menos probar la carne de ballena y así lo hicimos, tanto a la plancha, como cruda. Un sabor algo extraño entre jamón y pescado, pero que no me disgustó.



Domingo noche nos dirigimos al aeropuerto y de camino a Viena, via Colonia (Alemania). Viaje sin contratiempos y llegada a Brno antes de mediodia. Ese mismo dia, trabajaría de noche, y por fin tras 2 largas semanas vería la oscuridad de nuevo!!! Vuelta a centro-europa de nuevo con muuuucha fiesta, que ya contaré más adelante. Ahora, entre tanto ser malos y esperarme a mi regreso a Madrid que será en escasas dos semanas.


Por cierto, os he dicho que tengo un nuevo miembro en la familia?? David os saluda desde internet:


domingo, 12 de junio de 2011

Iceland III : Krafla, Egilsstadir, Hofn

El dia siguiente se centraría en el area volcánica de Krafla. Tras recoger a nuestro amigo australiano, nos dirigimos a dicha zona, no sin antes toparnos con otra maravilla que nos ofrecia Islandia, las pequeñas erupciones geotérmicas que había por el camino. El olor a azufre era muy fuerte, pero las vistas impresionantes. Parada obligatoria para hacer unas cuantas fotos:





Un poco más tarde, llegamos a a la estación geotérmica, donde los muy vikingos aprovechan la energia que desprende el volcán. Llegamos al punto más alto donde se podía llegar con el coche y vimos el paisaje totalmente nevado que teniamos a nuestros pies. No caminamos mucho por esa montaña (por cansancio y por nuestro equipo de expedición nulo) y decidimos bajar al segundo parking y caminar hasta las fisuras y cráteres que había dejado el volcán no hacía mucho (1984). Antes de empezar, vimos como regresaba ya gente y decidimos preguntar:
- Hey man, how long does it take to arrive there?
-......(no answer)
-Hey man....
-......(no answer)
-Excuse me, I'm talking with you
-Nerozumim vole!!
El hombre no podia ser más que checo con esa educación y simpatia que les caracteriza...jajaja. Dario y yo pusimos pues nuestros conocimientos de la lengua eslava para una posible comunicación y nos dijo que no se tardaba mucho, unas 2 horas ida y vuelta, pero que con nuestro calzado no lo ibamos a conseguir. Entonces ya solo por orgullo nos aventuramos al cráter, una hora de caminata por la nieve con nuestras Adidas de barrio....ehhhh....y llegamos!





No conformes con el volcán, decidimos ir por un camino de cabras horas más tardes durante más de 30 km llegando así a una de las cascadas de agua más impresionantes del pais: Dettifoss





En el avión un tipo nos comentó algo sobre unas granjas para pasar la noche en plan campestre que se situaban cerca de la zona en la que nos encontrábamos. Era necesario desviarse de la carretera número 1, por un camino de piedras (peor que el anetior mencionado para llegar a Dettifoss) donde no estaban permitido automóviles que no fueran 4x4 y además vimos la publicidad como un sitio algo turístico (aunque fuera rural), lo que avisaba de un precio no muy económico probablemente. Por lo tanto, después de valorar la posibilidad, no lo intentamos.

Un poco más de carretera y llegariamos a otro pequeño pueblo llamado Egilsstadir, el que giraba también en torno a una gasolinera. Las fuerzas ya flojeaban y esta vez decidimos buscar cama donde pasar la noche. La afortunada fue una guesthouse con sleepbag accomodation, donde fijamos el precio en 7000 coronas para los 3 ( unos 13 o 14 euros por barba) y el dueño se despidió en plan broma (o no?) con un 'mmmm...Cheap Bastards'.

Ya con las pilas cargadas (teléfonos y cámaras incluidos) el dia siguiente lo dedicamos a recorrer la parte Este del pais. Dejamos la ring road y empezamos a conducir por los pueblos de la costa de los fiordos. Los paisajes y los cambios de clima en cuestión de minutos imborrables también. Paramos en un par de pueblos, en uno de ellos para tomarnos una cerveza (exactamente en Stödvarfjördur) y volver a probar suerte en couchsurfing para nuestra noche siguiente (sin éxito).








Antes de que se hiciera tarde (que no de noche jejeje) conducimos hacia el sur con destino Höfn. Los paisajes empezaban a cambiar y eran praderas y montañas verdes con cascadas de agua por todos los lados, a la vez que el gran glaciar aparecía de vez en cuando entre las montañas, pero de eso hablaremos en el siguiente post. Un poco antes de llegar al Höfn, la carretera nos ofreció la maravillosa vista que tiene Stokksnes, una playa de piedras y arena negra, arropada de unas montañas altisimas; sin duda no hay palabras para describirlo.








En Egilsstadir una amable señora en una tienda de souvenirs nos recomendó un sitio donde pasar la noche en Höfn, regentado por su hermana. A nuestra llegada, y con carta de recomendación en mano, dimos con el sobrino de esta señora y nos dimos cuenta que nos iba a ser imposible pagar ese hotel. Decidimos pues cenar tranquilamente en un bar (de nuevo algo de pescado local) y mirar alguna guesthouse a las afueras de la ciudad. Y la encontramos, también a un precio muy económico, fuimos a las 7000 coronas de nuevo y con la puesta de sol (el rebote en el horizonte de sol mejor dicho) más bonita que había visto en mucho tiempo. La casa en medio de una pequeña colina y un lago, la teniamos a nuestra entera disposición, compartiéndola con una expedición de aventuras sudafricana que nos ayudaron de hecho a encontrar a la dueña de la guesthouse. Podeis echarle un ojo a los aventureros si quereis aqui:

http://www.riaanmanser.com/pages/iceland.php
Nos lo pasamos en grande también con una copita de Jack Daniel's y una docena de cachorros que estaban en la casa. Las fotos del rebote del sol son a la 1.00 a.m ( 3.00 a.m en España)







La parte sur y la vuelta a Reykjavik la dejaremos para el último post que intentaré escribir lo antes posible.