Berlin 2012

Nos trasladamos a principios de Agosto y nos situamos en la capital alemana: Berlín.

Era la primera vez en esta ciudad y solo podía contar con la mejor compañia, parte del espíritu vivo de Minerva: Emiliano, Arash, Hiva y un trio de polacas de la segunda época del Pirate Bay.
Todo el tinglado estaba planificado hacía un año, y decenas de 'Karlskronenses' entusiasmaron con la idea de volvernos a reunir en algún lugar de Europa. Al principio más de 50 personas alzaron la voz via facebook proclamando su asistencia inminente, pero los meses fueron pasando y el climax mermando, dejando así a los 4 héroes de turno la misión de ofrendar a Minerva de nuevo con una buena ración de fiesta y buen rollo.
A decir verdad mi asistencia era dudosa también hasta el último instante, pero finalmente me monté en el bus y me tragué 7 horitas de bus para unirme a citado evento.
Un apartamento fue alquilado para todo el fin de semana para Hiva, Emiliano, Arash y yo, el cual pisamos más bien poquito para aprovechar bien el tiempo en la ciudad.
Turisticamente destacar el monumento a los judíos, la puerta de Brandenburgo y los restos del famoso muro:

Pero lo que más me gusto sin duda fue el ambiente multicultural y alternativo que se respiraba por toda la ciudad. Muy buenos ratos pasamos a orillas del rio Spree disfrutando de un sol espectacular y unos cuantos mojitos:

Salimos las dos noches de fiesta en garitos que realmente no recuerdo el nombre, pero lo pasamos realmente bien. Eso si, precios desorbitados, para lo que un trabajador checo estaría acostumbrado.

Domingo de resaca de vuelta a Brno en bus y pasando lo mejor que pude todo el mes de Agosto trabajando, sin ningún viaje corto y lo que más me pesó, sin poder ir a mi querida Torrevieja (por primera vez en 18 o 19 años). Aunque la espera tiene sus frutos y pronto partiría a la perla del Pacífico, pero dejemoslo para la siguiente entrada.

Y como siempre, gracias Minerva por ser como eres.

Disfrutar del otoño...
Video dedicado a mi hermano, que está muy metido en el rollito Electro-House que pega en estos momentos...

Road Trip III:Krka

Lo sé. ¿Cómo es posible que se esté tan ocupado para no escribir una triste linea en 3 más de 3 meses? Pues a decir verdad he tenido una temporada muy muy ajustada de horarios y cuando podía descansar, realmente no me apetecía encender el ordenador y ponerme a escribir. De hecho también soy partidario de no forzar al escribir, y tan sólo hacerlo cuando realmente se desea. Si retomamos el hilo del blog, me quede comentándoos lo bonita que es la costa Croata. Después del paso fronterizo por Montenegro, intentamos hacer una visita por Dubrovnik. Fue más que fallida por la cantidad de tráfico y calor que tuvimos que soportar, y decidimos llegar cerca de Sibenik para pasar la noche. El objetivo del dia siguiente era visitar la majestuosidad del Parque Nacional de Krka. Lo más curioso del lugar es la posibilidad de darte un chapuzón en las cascadas de agua y disfrutar de unos parajes espectaculares.

 

 Las cuevas tampoco tenían desperdicio: 

Esa misma tarde seguimos ascendiendo y acabamos en Senj, nuestro último lugar costero del viaje. Nos dimos algún capricho para cenar y vimos una perfecta puesta de sol. 

 Dormimos un poco en el coche y decidimos iniciar el viaje de vuelta a Brno sobre las 4 de la mañana. ¡Las vacaciones se habían terminado!

Por el momento :).....

Road Trip II: Croatia-Bosnia-Montenegro

Bajamos pocas decenas de kilómetros al levantarnos por la mañana tras el chapuzón matutino aún en Sukošan y llegamos a un pueblo (que sinceramente no recuerdo el nombre) donde emprenderiamos una aventura acuática en barco. Cansado de esas barcas de pedales en la costa levantina, esta vez la cosa tenía que subir de nivel. Y así fue, un barquito a motor para nosotros solos durante toda la tarde, y a un módico precio de 35-40 €.

Pasamos la noche en un apartamento pegado a la carretera regentado por una pareja de jóvenes bastante amables e incluso nos dimos el placer de una mariscada uno de esos dias.

El dia siguiente nuestro objetivo fue pasar la ciudad de Split y adentrarnos en la península de Korčula. Fuimos a parar a un pequeño pueblo recomendado y ya conocido por Carmen llamado Žuljana, donde nos dedicamos al buceo, a disfrutar de la playa e jalarnos una olla entera de mejillones frescos. La foto de la tortuga que encontramos por el camino no tiene desperdicio tampoco:

La noche fue más que divertida. El caso es que encontramos una playa algo apartada del pueblo perfecta para pasar la noche. Disponiamos de sacos de dormir y el colchón hinchable que los distribuimos como si de un campamento base estuviéramos hablando. La noche pintaba bien a la luz de las estrellas y sin nadie que molestara pero tan remoto era el sitio, que se podian escuchar aullidos de algún animal que otro. Tanto que después de algún mosqueo por ruido, hicimos una pequeña pasada con la literna alrededor, descubriendo un coyote oliesqueando nuestros enseres. ¡Al coche a dormir! gritó Carmen asustada por el carroñero. Jajaja....Si, la noche hubo que pasarla en el coche.

El dia siguiente pasariamos la frontera de Bosnia, durante unos 20 km, para adentrarnos en los dominios de la gran Dubrovnik. El plan era llegar a Boka Kotorska en Montenegro, y así lo hicimos, rebasando otra frontera más y coleccionando un sellito más en el pasaporte.

Curioso Montenegro. Por lo poco que vimos (apenas una mañana), nada te dejaba indiferente. Era como trasladarse en el tiempo 30 años, cediendo el paso a las vacas por la carretera o viéndo coches que yo creia extinguidos. Otra curiosidad es la moneda, que aún sin estar en la Unión Europea, usan el €uro. 

Pocas fotos tengo de esta expedición....asi espera, esta meando en lo alto de Boka Kotorska jajaja

Aquí llegó nuestro punto final de descenso, y el dia siguiente empezamos de nuevo la subida, que contaré en el siguiente post.

Seguir soñando....y viajando

Road Trip I: Plitvicka Jezera & Zadar

Hace dos años ya publiqué mi primer viaje por tierras croatas de la mano de Stepan, Lubos y Navrz. Dije que volvería a conocer el resto del pais, y es lo que he hecho durante algo más de una semana. En este caso, como no podría ser de otra manera, Carmen ha sido mi compañera de carretera. Pues bien vamos a relatar (en un post largo por partes) los cerca de 3.000 km que hemos conducido, los 6 paises por los que hemos cruzado y sobre todo la experiencia tan buena de conocer mundo :)

Salimos el Sábado al alba con destino Zagreb. Después de cruzar Austria y Eslovenia, nuestro objetivo era comer en la capital croata y darnos un paseo para bajar la comida por alli. Los planes cambiaron al encontrarnos un tráfico horrible unas decenas de kilómetros antes de llegar. Tiramos de ruta alternativa, gracias al mapa de carreteras europeo que teniamos, y sin que sirva de precedente nos salió bien la jugada, ahorrándonos la fila de coches y el peaje en la autopista. Decidimos pues llegar directamente hasta nuestro destino del dia, el Parque Nacional Plitvicka Jezera (Los Lagos de Plitvice). Encontramos un apartamento muy decente donde pasar la noche (por tan solo 10 euros por barba) y nos relajamos esa noche por el campo, ya que la visita al parque sería demasiado tarde para realizarla.

Al dia siguiente, no hubo excusas, el parque patrimonio de la Unesco fue pateado durante 5 horas. Una maravilla de sitio que podeis observar en las siguientes fotillos:

Tras la visita campestre, el primer baño de la temporada en el mar era más que obligatorio, y dirección Sur, llegamos hasta la localidad de Zadar, situada más o menos en el centro de la costa del pais. Empezamos a buscar algo situado cerca de la orilla y nos decantamos finalmente por un camping en un pueblo cercano llamado Sukošan. Compramos algo para cenar y una botellita de Martini para pasar una buena noche sobre la costa rocosa adriática. 

Los puestos ambulantes de fruta en esta parte de Europa son muy habituales, y nos pusimos de Fikis (Higos) hasta las manillas :)

Bueno y tras unos chapuzones más que merecidos y una hippie-cena a la luz de luna, nos dispusimos a dormir en aquel camping. Carmen durmió en el coche (gran error: con la ventana abierta) y yo en el césped con el saco de dormir. La noche fue muy molesta gracias a nuestros amigos los mosquitos y no sé si sentirme orgulloso o directamente gilipollas, pero fui capaz de contar el número de picaduras que tuve al despertar y la cifra ascendió a 41 (bueno....como yo digo, una experiencia más).

El viaje continuó hacia el Sur el dia siguiente, pero dejemóslo para la siguiente entrada.